domingo, 2 de febrero de 2014

Gustavo Garzón, Mas allá de la transparencia, 2011

Foto: abraxasinstinto.blogspot.com
Carne de mi alma.
Espacio de mis andares.
Infinita sombra de mis quehaceres.
Te miro hijo mió en las calles, 
en los restaurantes, en alas universidades.
Todos se parecen a vos y ninguno es tanto 
en mi vacío.

Te acarició en los libros que escribiste, 
en los dinosaurios que trajiste a casa,
en los fósforos con que prendiste la cocina los
días de nada en la alacena, en las páginas
que me quedaron por vivir junto a tus hermanos.

A veces me despierto hijo mío y voy a tu cuarto, 
a ver si has llegado.
 Ayer creí que entrarías a saludarme 
y esta tarde te esperaba como quien espera al niño de sus sueños, de sus amores.

Tus amigos han venido a verme; me dicen que habrán palabras sobre vos 
después de veintiún años, pero prefiero caminar hasta la plaza a reclamar
tu presencia en mi vida, en mi casa.


Contenido publicado originalmente en:

Gustavo Garzón Guzmán
Más allá de la transparencia
Casa de la Cultura Ecuatoriana 2011 

Tomado de: http://asfadec.blogspot.com/2013/12/gustavo-garzon-todos-se-parecen-vos-y.html?spref=tw

No hay comentarios:

Publicar un comentario